El punto medio. El punto medio entre dos extremos, esa es la clave.
Considero que se trata de tener personalidad, y no dejarse llevar por la nube de moscas que bailotean y zumban todas a la vez, por igual, al unisono.
No, no, no. Se trata de brillar de entre las moscas, de ser abeja, avispa, mariposa, o incluso oruga chilena.
Pero tener personalidad tampoco significa que debamos irnos al otro extremo, al radical alternativo... lo angulósamente diferente, lo macabro o lo anti-normal.
No, no, no. Tampoco. Queriendo ser el más alternativo o la más diferente al resto del mundo..., acabamos siendo una mosa más. Una mosca más, sí. Puede que ahora te encuentres revoloteando junto a un excremento lleno de purpurina, tacones, botas, antifaces... o cualquier prenda o estilo fuera de lo normal; pero serás una mosca más... sin personalidad.
No trates de parecerte a algo, no te ciñas a un modelo de comportamiento o estilo o lo que sea.
Sé natural, y sé mosca... sólo sé mosca si tú, a diferencia de las avispas, mosquitos y cucarachas, de verdad naciste mosca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Sensaciones que revolotean en mi mente