Sábado veraniego por la mañana, pensativa en la terraza...

La vida, qué extraña y complicada; sobre todo complicada... y lo otro, también. Lo pasamos bien, lo pasamos mal, lo pasamos muy mal, lo pasamos genial, lo pasamos francamente bien y volvemos a pasarlo podidamente mal. Qué difícil es pensar, que bueno y malo a la vez, que sencillo y complicado… y complicado otra vez.La vida… tan subjetiva. Cada persona la vive y siente de un modo completamente distinto, y cada uno es libre de hacer con ella lo que quiera… aprovecharla (¿cómo se aprovecha la vida?) o incluso despreciarla y abandonarla junto a un bote de pastillas de la mano de una sobredosis.¿Es complicado ser feliz? Mi opinión es que todo depende de con qué seas capaz de conformarte… “no es más feliz quien más tiene, sino quien menos necesita”, y…¡qué gran verdad! Ser demasiado exigente con uno mismo no puede traer nada bueno, porque al fin y al cabo, te convierte en un ser infeliz en el 70% de los casos en los que deberías conformarte, alegrarte y sonreír. Nadie nos ha enseñado a vivir, por desgracia, pero… ¿nos han enseñado a conformarnos con poco?, ¿nos han enseñado a ser exigentes en justa medida con nosotros mismos?, y lo más importante… ¿nos han enseñado a querernos?... o es que se nace con la confianza y la autoestima suficiente como para afrontar la vida tal y como se nos presenta…?Supongo que todo esto está muy influenciado por las experiencias que vivimos, por los miedos que pasamos y las victorias ganadas…, y también depende del apoyo de los amigos y familiares, que debe ser suficiente ya que es algo muy muy muy importante… mucho.Las obsesiones nunca fueron buenas, y hay que saber guardar el punto medio, las distancias entre los extremos y lo radical. Hay que probar a ser normal, o medianamente normal; aunque no creo que vaya a conseguirlo nunca ya que ser normal no ha sido ni será lo mío. De todos modos, ser normal es demasiado poco objetivo, y este mundo excesivamente subjetivo; así que no consigo aclararme lo más mínimo. ¿Cómo vivís vosotros? ¿Cómo hacéis para despreocuparos, sonreír y dar lado a los problemas al mismo tiempo?.. O es que no lo hacéis? El truco está en no pensar tanto, seguro! Pero, por suerte o por desgracia, soy de naturaleza pensativa.Cuando he empezado a escribir tenía muy claro de lo que quería hablaros, lo que quería contaros pero… escribir hace pensar, y pensar hace escribir… y al final una no sabe por donde empezar ni cuando terminar, y menos… sobre qué hablar. Reflexionar sobre la vida está ya muy visto, y supongo que para quien no lo escribe, leerlo es lo más coñazo del mundo, de todos modos dentro de una semana ni siquiera yo seré capaz de entender este texto, pero me ha desahogado… que creo que es lo que necesitaba en este momento. Gracias por leerme, un saludo y suerte.